Huidobro, un atentado contra lo hegemónico

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Caligrama de Vicente Huidobro. Fuente: Antonio Miranda.

Pocos, muy pocos países, han sido agraciados con tantos genios de la literatura como Chile. Genios que además han tenido la suerte de ver reconocido mundialmente el talento de sus plumas. Como Gabriela Mistral, Pablo Neruda, Nicanor Parra y Pablo de Rokha (todos ellos, menos Rokha, premios Nobel de literatura). Y como Vicente García-Huidobro Fernández, más conocido como Vicente Huidobro, de quien hoy dedicaremos unos minutos de nuestro tiempo en este blog amante de las letras y los fonemas, de las sílabas y los sonidos.

Huidobro es uno de esos creadores literarios y poetas que no deja impasible a nadie que lo lee. No es un lírico de medias tintas, no es uno de esos ambivalentes cobardes que no se mojan. Huidobro es, por encima de todo, un creador y difusor de vanguardia, de teorías literarias y artísticas que osan desafiar al stablishment literario y cultural de su época histórica. No en vano, el chileno tuvo la suerte o la desgracia, según algunos de rodearse de un literato revolucionario como Apollinaire.

Pero Huidobro es igualmente muy importante para la historia de las letras en castellano por su influjo ejercido en la poesía vanguardista española, tal como señala Pizarro (1969). Esto es algo que a algunos españoles puede sorprender, ya que algunos de ellos siguen seguimos, que la autocrítica es siempre necesaria aún empeñados en creerse creernos la «madre patria» literaria y cultural del resto de naciones y países hispanoparlantes in saecula saeculorum.

Lo cierto es que el creador chileno ejerció de puente entre Francia y España para la penetración del vanguardismo de principios del siglo XX a través de insignes figuras como Guillermo de Torre, Gerardo Diego o Cansinos-Assens. Serían 1921 y el Ateneo de Madrid los puntos culminantes de esta irrupción en escena, cuando Vicente Huidobro dio una conferencia en el ilustre sitio madrileño.

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Vicente Huidobro, de niño. Fuente: Museo Vicente Huidobro.

Por otra parte, Huidobro es asimismo la alma mater de la poesía chilena del siglo XX. Tal como afirma Pizarro (1969), el poeta chileno adoptó en su país el rol de introductor de las posiciones más revolucionarias y avanzadas del movimiento de vanguardia en Europa, difundiendo su propio creacionismo en el país latinoamericano y ejerciendo una influencia considerable sobre las letras chilenas gracias a su práctica poética transgresora.

En suma, la poética del chileno se alza como un verdadero atentado contra lo hegemónico, parafraseando parcialmente uno de sus poemas más sugerentes y poderosos («La poesía es un atentado celeste», que a continuación reproduciremos para el disfrute de nuestros estimados lectores). Huidobro se erige, a través de su palabra trastocada y mutable, como un guerrero herido en permanente contradicción, que está ausente pero preparado, que no está pero que está, que siente el peso de lo equívoco en su alma pero que se atreve a buscar la verdad, que está lleno de dolor en su ternura; que, por fin, espera en silencio a que arribe a buen puerto su ser angustioso lamentable que se va convirtiendo en árbol siempre deshojándose.

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Retrato de Vicente Huidobro. Fuente: Sic Poesía Chilena.

«La poesía es un atentado celeste»

Yo estoy ausente pero en el fondo de esta ausencia
Hay la espera de mí mismo
Y esta espera es otro modo de presencia
La espera de mi retorno
Yo estoy en otros objetos
Ando en viaje dando un poco de mi vida
A ciertos árboles y a ciertas piedras
Que me han esperado muchos años

Se cansaron de esperarme y se sentaron

Yo no estoy y estoy
Estoy ausente y estoy presente en estado de espera
Ellos querrían mi lenguaje para expresarse
Y yo querría el de ellos para expresarlos
He aquí el equívoco el atroz equívoco

Angustioso lamentable
Me voy adentrando en estas plantas
Voy dejando mis ropas
Se me van cayendo las carnes
Y mi esqueleto se va revistiendo de cortezas
Me estoy haciendo árbol Cuántas cosas me he ido convirtiendo en
[otras  cosas…
Es doloroso y lleno de ternura

Podría dar un grito pero se espantaría la transubstanciación
Hay que guardar silencio Esperar en silencio

De Últimos poemas, 1948

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Para más información sobre el vanguardismo en la figura de Huidobro, véase Pizarro, A. (1969), El creacionismo de Vicente Huidobro y sus orígenes. Enlace: http://www.vicentehuidobro.uchile.cl/ensayos_ana_pizarro.htm.